Desde hace un par de años, Chañar Ladeado cuenta con una Asociación Civil que trabaja de manera desinteresa en Terapias Alternativas con Caballos. Hablamos con el Médico Veterinario Edgardo Nicolino, integrante de la entidad, quien nos explicó cómo llevan adelanta “esta noble actividad.
Esto surgió hace unos años como una inquietud aislada de alguno de nosotros que creíamos algo interesante de proponer, pero es complejo, hubo que tener en cuenta muchas cosas. Se organizó una reunión con Daniel Pierella y Natalí Lorenzini a la cabeza y algunos más que hoy están tenemos y concertaron una entrevista con la agrupación Felices los Niños, de Casilda”, narró el Veterinario.
Sumado a esto, explicó que fue convocado por su profesión y se dio la particularidad que en es en la reunión se encontró a un ex compañero de facultad, quien presidía la congregación casildense. A partir de allí entablaron un proyecto y empezaron a trabajar bajo su ayuda, puertas para adentro durante dos años.
“Es una tarea que sin interdisciplina no funciona, por lo tanto había que buscar profesionales y no profesionales, tratar cada tema desde el caballo hasta el sistema educativo. Oficialmente empezamos a trabajar hace 4 años”, señaló el profesional.
A parte de lo que es el material humano, Nicolino sostuvo que hay “dos cosas muy importantes”; una tiene que ver con la elección del caballo y la otra con el ambiente terapéutico que es el lugar donde se realizan las tareas. Cabe destacar que como es una terapia alternativa se debe utilizar al ambiente natural en toda su expresión; sonido de pájaros, olores a tierra y al caballo, viento, todos los sentidos.
Sumado a esto señaló: “Ese ambiente no lo encontrábamos demasiado, probamos en distintos lugares hasta que Domino Dinella y el club de cazadores nos cedieron el espacio y pudimos crecer. Hoy aparece la posibilidad de utilizar las instalaciones del Motor club; un espacio más amplio, más relajado para los caballos, que se estresaban un poco”.
Por otra parte, el Terapeuta explicó cuáles son los dos caracteres importantes que debe poseer el animal para entrar en acción; La mansedumbre y el estado de salud de la locomoción, refiriéndose a cómo se mueve.
“Cuando priorizamos la mansedumbre caemos en animales demás años, empieza a haber problemas de locomoción, por eso no es fácil, tenemos caballos muy útiles. El caballo cuando hay un chico en el medio sabe de qué se trata, va más allá de lo que podemos explicar”, manifestó.
Además, agregó que el equino en su paso relajado transmite temperatura, patrón de marcha que estimula sensores que dan placer. También la frecuencia cardiaca transmite una pulsación al cuerpo del jinete que hace bajar pulsaciones y finalmente se da la comunicación entre el animal y el chico.
Sobre la actualidad, Edgardo expresó que en este momento asisten nueve chicos y se encuentran en están espera para poder incorporarse, luego de que se hagan las entrevistas. Cuentan con cinco caballos más una yegua que se está preparando.
“Como lo nuestro es Ad honorem, le dedicamos toda la tarde del sábado y sólo podemos hacer tres turnos por dia. Hace 4 o 5 años no imaginábamos que no nos alcanzaría el tiempo, hoy somos una institución con personería jurídica, eso nos da proyección al futuro”, remarcó Nicolino.
Cabe mencionar que la actividad es gratuita y desde un principio se dio por sentado que los participantes no tengan abonar, porque consideran que tiene que estar al alcance de todos. Esto, según dijo el experto, va generando un clima agradable tanto en el grupo interno como en el de padres y chicos, formando una “gran familia”.
“Lo nuestro es alternativo, terapia complementaria, quiere decir que si todas las semanas los chicos anduvieron de un consultorio a otro, el sábado al aire libre tienen la oportunidad de divertirse con un cómplice que es el caballo, la asistencia nuestra al rededor y tal vez explota en ese momento lo que en toda la semana no salió. Esto es reciproco, no vamos pensando en hacer un bien, sino que nos hace bien compartir ese momento”, finalizó Edgardo.
Terapias Asistidas “El Paso”, es un claro ejemplo de que cuando se junta buena gente con corazones generosos, no hay barreras que impidan cumplir los objetivos y mejorar la vida de personas que más lo necesitan.
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